Cremosa, aromática, suave y fresca, la panna cotta es un postre ideal para el verano, o simplemente cuando no podemos o queremos usar el horno. Con un toque de azafrán y acompañándola de una salsa de fruta casera, disfrutaremos de un bocado dulce muy seductor que encantará a los amantes de los sabores lácteos.
Una buena panna cotta tiene que saber a nata y no abusar de la gelatina. Es más fácil aumentar la proporción de gelificante para asegurar un cuajado más firme que permite desmoldar sin sustos, pero merece la pena jugársela para conseguir esa irresistible textura cremosa. Si lo de desmoldar no se nos da muy bien, o si no queremos esperar varias horas de reposo, podemos servirla en vasitos o copas bonitas y listo.
¡Bienvenido a nuestra sección de recetas! Aquí encontrarás una variedad de platos que van desde lo clásico hasta lo innovador para cualquier ocasión
Mostrando entradas con la etiqueta azafrán. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta azafrán. Mostrar todas las entradas
martes, 11 de agosto de 2020
Suscribirse a:
Entradas (Atom)