Esta tarta mousse de leche merengada es más sencilla de preparar de lo que pueda parecer y el resultado es garantía de éxito. Es una receta que no necesita horno, algo muy de agradecer en los tiempos que corren. Hay que prepararla el día anterior porque requiere de un tiempo de frío. Un poco de organización y listo.
La base de la tarta es la clásica de galletas y mantequilla, la de toda la vida, que se prepara en un pispás triturando ambos ingredientes juntos. Yo he usado galletas de canela, que le van genial a este postre. El resto es preparar la mousse y ¡a correr!